Cadillac tuvo un mal año en el 2019, ya que la mayoría de sus modelos registraron caídas de dos dígitos año tras año. A Lincoln le fue algo mejor, pero es solo un momento de ilusión.
La automotriz de lujo de General Motors llega al 2020 con una línea de modelos que amenaza los resultados, y que no creo que puedan mejorar mucho su imagen.
Durante el 2019, las ventas de Cadillac fueron de 156,246, un aumento del 1%. Las ventas del XT4 de baja escala aumentaron 310.9% a 31,987. El vehículo es un crossover relativamente económico con un precio base de $ 35,190. Fue el único éxito de Cadillac.
El XT5, el vehículo más vendido de Cadillac, cayó un 17,6% a 49.879. Las ventas del XTS cayeron un 36,2% a 11.304. Las ventas del Escalade cayeron un 3,9% a 35.424. Cadillac recibió un poco de ayuda del XT6. Tuvo ventas de 11,559.
El XT6 no estaba disponible el año pasado. Con la excepción del XT4, las ventas de modelos de Cadillac disponibles en las categorías cruzadas y de lujo críticas disponibles en 2018 y 2019 fueron comparativamente pobres.
Linocln vendió 112.204 vehículos en el 2019, algo más que el 2018, y con un pequeño repunte estos últimos años por sus SUV’s. Igual está muy lejos de los 190.009 que vendió en el año 2000, y los 230.000 del 1990.
Es difícil saber exactamente cuáles son los problemas de Cadillac. Entre las razones que dan la mayoría de los expertos es que un Cadillac no es un Mercedes, BMW, Audi o Lexus, y que su nomenclatura de sus modelos espantó a muchos confundidos clientes.
Algo que pasó con Lincoln también y que está modificando poniéndolo nombres normales a sus vehículos. La marca estuvo muy activa estos últimos anos, y sus problemas parecían que se diluían, pero el nuevo Aviator salió fallado de fábrica y esto le dió una voz de alerta a sus viejos clientes.
Tanto Cadillac como Lincoln han perdido clientela joven que se está yendo a Lexus o Genesis, y se sabe que ninguna de las automotrices de Detroit puede hacerles frente a sus contrincantes alemanes.
Las marcas que atraen más a los compradores de automóviles de lujo, son Mercedes, BMW y Lexus, y sus ventas lo demuestran. Mercedes vendió 357,729 el año pasado, BMW vendió 324,826 y Lexus vendió 298,114.
Muchos compradores estadounidenses se han alejado de los sedanes de lujo confortables algo que mantenía a las marcas de Detroit a flote. Tanto las ventas de Lincoln como de Cadillac en la categoría de sedanes de lujo, se han desplomado.
Sus rivales alemanes y japoneses parecen producir varios modelos nuevos cada año, y Genesis que viene con todo, ya está tocando los bolsillos de los compradores de Lincoln y Cadillac, con nuevos y fiables modelos.
Tanto los problemas de Lincoln y de Cadillac tienen ahora décadas de antigüedad. Hubo una época dorada que los alemanes ni se atrevían a competir con los modelos de lujo americanos.
Pero eso ya paso, y aunque quisieran no pueden competir, ni con los Alemanes, ni con los Japoneses y ahora, ni con los coreanos.
Fiat Chrysler dejo de producir sedanes de lujo cuando Lexus, Infiniti y Acura empezaron a golpear el mercado.
Tanto Ford como General Motors, continúa creyendo que puede cambiar esa tendencia, pero han pasado años y eso no ha sucedido, y no hay razón para creer que vaya a cambiar.
Los ejecutivos de Lincoln y Cadillac tienen una visión errónea de sus productos, y hasta que no llegue un directivo que se dé cuenta de ello, seguirán perdiendo terreno. El tema que si siguen en la misma, ya no le quedará mucho camino por recorrer.
Las marcas de lujo de los tres grandes de Detroit, Lincoln, Cadillac y Chrysler, han tenido una competencia feroz.
Chrysler dejo sus sedanes de lujo hacer mucho tiempo, por el avance japonés, mientras Lincoln y Cadillac no le queda mucho que pensar para tomar una nueva dirección, y tiene que ser rápido, ya que no solo tienen el avance alemán y japonés, sino que también tienen el coreano, y este se viene con todo.